Arganour: de un sueño casero a un referente en cosmética natural
“Éramos tres ingenieros con aceite de argán, ahora somos todo un movimiento de cosmética natural”.
Arganour no comenzó en un gran laboratorio ni en una multinacional. Su historia arranca en 2013, en los salones de casa de tres ingenieros informáticos que, hartos del trabajo corporativo, decidieron dar un giro radical a sus vidas. Inspirados por el deseo de crear algo que marcara la diferencia, se enfrentaron a un reto poco convencional: transformar su experiencia técnica en conocimiento para formular cosmética natural, algo prácticamente desconocido en aquel entonces.
Un viaje a Alemania, país pionero en cosmética natural, despertó su ambición: ser líderes nacionales en un mercado donde España también puede competir, no solo con otros países vecinos, sino directamente con la cosmética convencional. Se inspiraron en una tendencia consolidada en otros países y decidieron adaptarla con una visión propia.
Con humildad y recursos limitados, empezaron embotellando aceites vegetales en casa y llevándolos a tiendas locales y ferias artesanales. Fue el aceite de argán, con sus propiedades únicas, el que se convirtió en su punta de lanza. La calidad del producto y la aceptación de los clientes fueron la confirmación de que estaban en el camino correcto.
Así nació Arganour, cuyo nombre surge de “Argán” por el aceite homónimo y “nour”, que en árabe significa “destello de luz celestial”, en referencia al rostro y los resultados visibles que ofrecen sus productos. La marca celebra ese primer aceite como símbolo de sus comienzos, pero también refleja la pasión y el esfuerzo que los ha llevado a ser líderes en cosmética 100% natural, dejando muy atrás sus comienzos más artesanales para marcar la diferencia con innovación, ciencia y formulación avanzada en sus propios laboratorios.
“Éramos tres ingenieros con aceite de argán, ahora somos todo un movimiento de cosmética natural”.
Arganour no comenzó en un gran laboratorio ni en una multinacional. Su historia arranca en 2013, en los salones de casa de tres ingenieros informáticos que, hartos del trabajo corporativo, decidieron dar un giro radical a sus vidas. Inspirados por el deseo de crear algo que marcara la diferencia, se enfrentaron a un reto poco convencional: transformar su experiencia técnica en conocimiento para formular cosmética natural, algo prácticamente desconocido en aquel entonces.
Un viaje a Alemania, país pionero en cosmética natural, despertó su ambición: ser líderes nacionales en un mercado donde España también puede competir, no solo con otros países vecinos, sino directamente con la cosmética convencional. Se inspiraron en una tendencia consolidada en otros países y decidieron adaptarla con una visión propia.
Con humildad y recursos limitados, empezaron embotellando aceites vegetales en casa y llevándolos a tiendas locales y ferias artesanales. Fue el aceite de argán, con sus propiedades únicas, el que se convirtió en su punta de lanza. La calidad del producto y la aceptación de los clientes fueron la confirmación de que estaban en el camino correcto.
Así nació Arganour, cuyo nombre surge de “Argán” por el aceite homónimo y “nour”, que en árabe significa “destello de luz celestial”, en referencia al rostro y los resultados visibles que ofrecen sus productos. La marca celebra ese primer aceite como símbolo de sus comienzos, pero también refleja la pasión y el esfuerzo que los ha llevado a ser líderes en cosmética 100% natural, dejando muy atrás sus comienzos más artesanales para marcar la diferencia con innovación, ciencia y formulación avanzada en sus propios laboratorios.

De Málaga para el mundo
¿Por qué Málaga? No solo es una ciudad de paisajes inspiradores y rica tradición, sino también el hogar y punto de encuentro de estos tres socios. Aquí estudiaron y aquí decidieron sembrar las semillas de un sueño. Desde 2013, Casabermeja, una localidad malagueña rodeada de naturaleza y alejada de la urbe, ha sido el epicentro de una idea que se transformó en una empresa pionera en cosmética natural.
En sus instalaciones, que cuentan con laboratorios equipados con maquinaria de vanguardia, se lleva a cabo todo el proceso: desde la ideación y formulación hasta la producción, envasado y distribución. Este control integral asegura la máxima calidad en cada producto, manteniéndose fiel al compromiso de excelencia que define a la marca.

Innovación con propósito
La filosofía de Arganour va más allá de la simple fabricación de cosméticos. Cada producto nace tras un proceso de investigación riguroso, manteniendo una estrecha colaboración con laboratorios que los mantienen al tanto de los últimos avances en ingredientes y activos naturales. Además, participan activamente en ferias y eventos internacionales para mantenerse a la vanguardia de la innovación en activos 100% naturales.
Así surgieron productos icónicos como Push Up, un voluminizador y reafirmante de pecho y glúteos con resultados respaldados por estudios. Con ingredientes 100% naturales como el fenogreco y extractos innovadores de kigelia africana y algas, este producto demuestra que la ciencia y la naturaleza pueden coexistir para ofrecer resultados palpables y seguros.

El reto del 100% natural
Formular cosmética completamente natural es un desafío que Arganour ha asumido como propio. Mientras que muchas marcas se conforman con un "99% natural", ese 1% que falta marca una diferencia crucial. Desde 2013 Arganour abandera la cosmética 100% natural en España con la determinación de competir directamente en el mercado internacional y fortalecer la "marca España".
La investigación e innovación han marcado un antes y un después en el desarrollo de productos de Arganour. Gracias a la biotecnología y la ciencia de sus activos, han pasado de ser expertos en aceites esenciales y vegetales a líderes en productos ultra innovadores que revolucionan la industria cosmética 100% natural con cada lanzamiento.
Es interesante plantearse que, si los consumidores ya están concienciados sobre los beneficios de una alimentación 100% natural para su salud y para el medio ambiente, ¿por qué no extender esa misma lógica a la cosmética? Al fin y al cabo, se trata del "alimento de tu piel".

La promesa de Arganour
El compromiso sigue siendo el mismo desde el primer día: liderar un movimiento donde la cosmética 100% natural y eficaz es posible gracias a fórmulas complejas, innovadoras y solucionadoras. Un futuro donde la ciencia y la naturaleza caminan de la mano, creando productos que transforman la piel del rostro, del cuerpo y del cabello, y redefinen la manera en la que nos relacionamos con nuestro entorno y con nosotros mismos.