Cuidado facial en la adolescencia: acné, manchas y cómo elegir los productos adecuados
Durante la adolescencia, las glándulas sebáceas de la piel joven se enfrentan a una estimulación bastante alta, lo que puede provocar un exceso de grasa en la superficie cutánea. Esta sobreproducción de sebo, unida a la renovación acelerada de las células de la piel, crea un entorno propicio para la obstrucción de poros y la aparición de imperfecciones como acné, manchas, marcas post inflamatorias y/o irritación.
Es por eso que los cuidados para la piel juvenil deben estar enfocados en calmar, restaurar y equilibrar la piel: controlar la grasa sin resecar y proteger la barrera cutánea.

Los cambios hormonales y su impacto en la piel durante la adolescencia
El principal detonante del acné adolescente son las fluctuaciones hormonales. La pubertad activa la producción de andrógenos, hormonas que estimulan las glándulas sebáceas. Como resultado, muchos adolescentes comienzan a tener brotes de acné, puntos negros y granos inflamados que aparecen en la cara en zonas como la frente, la nariz y la barbilla.
Además, los cambios hormonales propios de la edad y el desarrollo, también pueden hacer que la piel se vuelva más sensible y/o reactiva. Es por todo esto que es importante que los productos para piel adolescente sean suaves, no comedogénicos e hidratantes.
¿Por qué los adolescentes tienen más brotes de acné?
El acné adolescente no solo está relacionado con el aumento de sebo a raíz de los cambios hormonales, sino también con factores externos como el estrés, la alimentación, la falta de limpieza facial o el uso de cosméticos inadecuados. Además, el contacto de la piel con la pantalla del móvil, tocarse la cara o dormir con el rostro maquillado pueden agravar el problema.
En muchos casos, los adolescentes intentan eliminar los granos apretándolos, lo cual puede empeorar la situación al favorecer la proliferación de granitos por toda la cara, la aparición de cicatrices y marcas de acné.
Para evitarlo es recomendable optar por un tratamiento de acné natural que respete y calme la piel, al mismo tiempo que controla los brotes de acné y regula la producción de sebo.
¿Qué productos son adecuados para la piel joven y delicada?
La piel adolescente es más sensible y reactiva de lo normal. Usar productos muy agresivos con alcoholes secantes o perfumes intensos, puede dañarla. Lo ideal es optar por cosmética natural para adolescentes que combine eficacia con suavidad.
Un buen kit de cuidado facial para adolescentes debería incluir un gel limpiador suave, un tónico, una crema hidratante ligera y, si hay tendencia al acné, un producto específico para tratar los brotes como la crema antiacné Equilibrium de Arganour.
Equilibrium es un tratamiento especialmente para tratar el acné ya que ataca desde el origen sin dañar la piel , ayudando a regular el exceso de grasa y mantener los poros limpios. Además ayuda a la textura de la piel evitando que se formen nuevas imperfecciones.
El BHA es clave para el tratamiento del acné, al ser liposulible penetra en los poros disolviendo el exceso de grasa y células muertas que suelen desencadenar los brotes. Este peeling es ideal para jóvenes que tienden a producir sebo y a sufrir obstrucciones con mayor facilidad, además tiene propiedades antiinflamatorias, lo que ayuda a reducir el enrojecimiento acelerando la curación sin dañar la piel.
La importancia de la limpieza facial diaria para prevenir el acné
Uno de los pasos más importantes en la rutina facial adolescente es la limpieza diaria. Limpiar el rostro por la mañana y por la noche elimina el exceso de grasa, restos de sudor, contaminación y células muertas que pueden obstruir los poros.
El uso de limpiadores específicos para piel grasa o propensa al acné puede marcar la diferencia.
El gel limpiador es ideal para pieles grasas ya que elimina de forma eficaz el exceso de sebo, su textura ligera permite una limpieza profunda sin obstruir los poros ni alterar el equilibrio natural de la piel. Además, al incorporar activos purificantes , ayuda a prevenir la aparición de nuevos brotes y deja la piel fresca y limpia.
Cómo prevenir las manchas y cicatrices provocadas por el acné
Muchos adolescentes se enfrentan no solo a los granos, sino también a las marcas que estos dejan después. Estas manchas o cicatrices pueden permanecer permanentemente si no se tratan correctamente. La prevención comienza evitando la manipulación de los granos y la aplicación de protección solar.
La exposición al sol sin protección favorece la pigmentación postinflamatoria. Nuestra crema solar SPF50 de Arganour ofrece una alta e inmediata protección frente a los rayos UVA y UVB.
Cómo identificar si la piel adolescente está seca o deshidratada
Aunque se asocie la adolescencia a la piel grasa, no todos los adolescentes tienen el mismo tipo de piel. Algunos pueden tener la piel seca o, incluso, deshidratada si utilizan productos seborreguladores demasiado agresivos.
La clave para este tipo de piel está en hidratar la piel con cremas hidratantes de texturas ligeras y no oclusivas. Saber identificar lo que necesita la piel es importante para evitar errores comunes que puedan desequilibrar su microbiota.
Cómo calmar la irritación y el enrojecimiento de la piel en adolescentes
El uso de exfoliantes, toallitas agresivas o tratamientos incorrectos pueden causar irritación, enrojecimiento o sensación de ardor en la piel adolescente. Los cambios hormonales y el estrés también influyen en su sensibilidad.
A parte de controlar el exceso de sebo es importante calmar la irritación cutánea y reforzar la barrera, para ello el extracto de harungana , presente en la crema para piel mixta, es conocido por sus propiedades regeneradoras que ayuda a equilibrar la piel sin provocar irritación.
Por otro lado la Chlorella vulgaris, incluida en la fórmula del equilibrium tiene un potente efecto antiinflamatorio que favorece la recupación de la piel, haciendo que equilibrium sea una opción ideal para pieles acneicas sensibles.
El cuidado de la piel en adolescentes no debe tomarse a la ligera. Comenzar con una rutina sencilla, coherente y bien formulada desde el inicio no solo mejora el aspecto de la piel actual, sino que sienta las bases para una piel sana a largo plazo. Comprender las necesidades de la piel joven, identificar el tipo de piel, utilizar productos adecuados y mantener una constancia diaria son los pilares clave.
La adolescencia es el momento perfecto para educar sobre la importancia del autocuidado, no desde el juicio, sino desde el respeto a la piel y su evolución natural. Apostar por la cosmética natural para adolescentes y evitar el uso indiscriminado de productos agresivos es una inversión en salud cutánea, autoestima y bienestar futuro.
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